En cuanto a compradores online, según el citado informe, en 2015 hubo alrededor de 300 millones de consumidores que pertenecen a 48 países europeos. 10 países europeos concentran el 85% de la actividad total de venta. Entre Reino Unido, Francia y Alemania representan el 61,9% de la facturación. Sólo Reino Unido acumuló un tercio de las ventas realizadas por Internet en Europa. A la cola figuran Rusia y Suiza, con un 4,5% y un 1,9% respectivamente.
Se calcula que el gasto medio por cabeza de cada consumidor osciló en torno a los 1.500 euros anuales en el pasado año. Y las previsiones siguen al alza. Uno de los principales factores de este progresivo aumento podemos encontrarlo en el proceso de digitalización llevado a cabo por muchas empresas y que ha incluido el paso de la venta física a la venta online.
En cualquier caso, son todavía, en proporción, una minoría las pymes que se atreven a vender a través de Internet, según los datos tan solo un 16%, por lo que este mercado va a seguir creciendo sin parar en los próximos años.
El informe de Ecommerce Europa señala que entre los usuarios habituales de Internet, las compras online son algo más generalizado, ya que el 57% de los internautas admite haber realizado alguna compra en comercios online.