Según el FMI (Fondo Monetario Internacional) sitúa a España entre los puestos destacados de las economías industrializadas y prevé un crecimiento del 2,8% para nuestra economía, 3 décimas por encima de la media de la Eurozona y una décima superior a las economías industrializadas.
Así se puede leer en el informe semestral del FMI, que lleva por título Perspectivas de la Economía Mundial y que se ha presentado hoy mismo en Washinton.
Parece que han cambiado las cosas en poco tiempo, ya que hace tan solo tres meses el FMI hacía una previsión para España algo distinta. El crecimiento para el presente año se quedaba en el 2,4%.
España es el país industrializado que cuenta con mayores perspectivas de crecimiento. En cuanto a tasa de crecimiento para este año solo se ve superada por Estados Unidos.
En el capítulo de recomendaciones a seguir, para el caso español el FMI recomienda ajustar más la fiscalidad y hacer nuevas reformas en el mercado laboral que permitan adaptarse a nuestra sociedad a los cambios demográficos, que obligan a que cada vez un número menor de trabajadores sostengan a un mayor número de pensionistas. Asimismo, este organismo recomienda la reducción de la deuda pública española, aunque esta se sitúa en un 98% del PIB, 7 puntos por debajo de la media de los países industrializados.
Respecto al mercado laboral el FMI demanda a España una mayor liberalización del empleo un esfuerzo en la reducción de la dualidad de dicho mercado y las diferencias existentes entre empleados fijos y eventuales. También pide a España políticas activas de formación para reducir el paro entre la población más joven y los desempleados de larga duración.
En este aspecto, las cifras de paro previstas para España al término de 2018 son de 17,2% y del 14,8% para 2019.