El ecommerce ya no tiene vuelta atrás. Los datos económicos para este año prevén un incremento de las ventas online tanto en España como en Europa y no solamente en la temporada navideña sino también durante todo el ejercicio.
Las transacciones llevadas a cabo a través de internet se dispararon en las navidades de 2014 un 20% según los datos de la patronal del sector, Adigital, que calcula que en total el volumen de negocio alcanzó los 2.500 millones de euros en España. Para este año se prevé un aumento aún mayor en estas fechas.
En todo el ejercicio 2014 se vendieron 16.000 millones de euros en nuestro país. Las cifras anuales de los últimos cuatro años evidencian una clara tendencia a sumar cada año más adeptos al shopping online.
A ello contribuye el gran número de aplicaciones móviles disponibles para comprar en gigantes de la distribución de libros, viajes o la moda sin olvidar a los autónomos que han decidido hacer de la venta online su modo de vida o complementarla con sus tiendas físicas.
Cada español habrá gastado este año unos 660 euros de media comprando en la red, es decir, casi un 9% más que el año pasado. Este dato todavía anda lejos de los 1.557 euros que se habrán dejado los ingleses, según un estudio de RetailMeNot, que también destaca Suecia como uno de los países de Europa donde más gastan los ciudadanos en internet.
El consumidor encuentra lo que quiere de una manera rápida, en el momento en que lo busca y, en según qué productos o servicios, más barato. Internet es capaz de solucionar problemas como tiempos, largas colas y hasta la pereza de salir de casa. Lo cierto es que los clientes tienen un mundo entero de productos a golpe de click. ¿Alguna vez ha sido más sencillo comprar?
Desarrollo de las herramientas ecommerce.
El mercado de las plataformas para poder crear tiendas en internet ha evolucionado mucho. Los softwares son cada vez más potentes y permiten poner a la venta cientos de artículos a la vez. Incluso miles. Las conocidas Magento o Prestashop ya no están solas en el mercado.
Sin embargo, la apertura de tiendas online para muchos emprendedores era un quebradero de cabeza al tener que contratar estos servicios a informáticos y programadores. Plataformas ecommerce como Shopify, más nuevas en el mercado, son aptas para personas sin conocimientos de programación que quieren abrir su tienda online.
Otras plataformas e-commerce ya han quedado desterradas. Es llamativo como todo un mercado de softwares se renueva y se expande sin cesar para ponerse a disposición de empresarios y autónomos y facilitarles sus objetivos de abrir una tienda en internet de forma sencilla. Una tienda con Shopify, por ejemplo, puede estar lista de forma absolutamente profesional en un plazo de tres días.
Sectores reticentes.
Pese al desarrollo del e-commerce en numerosos sectores (moda, ocio, salud, juego o la segunda mano) todavía existen algunos productos que se resisten a subir en la escala de ventas online. Fundamentalmente la alimentación. Aunque las ventas por internet aumentan en el sector del gran consumo, ese auge es mínimo y grandes marcas de supermercados siguen haciendo de la estantería y el pase por caja su fuerte comercial.
Otro gran quebradero de las ventas online es la prensa. Pese al desarrollo de webs de grandes periódicos y revistas, el mercado generalista sigue siendo reticente a pagar por la información.
Lo que está claro es que la evolución de la tecnología ya permite a ambas partes de la relación comercial -empresa y cliente- ver en la red grandes oportunidades en numerosos sectores y nichos comerciales: para unos de venta, para otros de compra.
Vender y comprar online es más barato, más rápido y más cómodo. Cuando los números hablan de una tendencia al alza es que algo está funcionando. Y con los datos de 2015, que se cerrarán y confirmarán al final del ejercicio, es evidente que el ecommerce ha venido para quedarse.