Así lo afirma un estudio de La Caixa que vincula un mayor nivel educativo y económico con el interés por la cultura y la asistencia a museos y espectáculos.
El mismo estudio asegura que el bajo nivel educativo hace que un porcentaje del 41,7% de los ciudadanos españoles no tenga apenas interés por espectáculos en directo como conciertos, obras de teatro y otros espectáculos culturales.
El informe de La Caixa lleva por título “El consumo cultural: ¿cuestión de gusto, o de precio?”, ha sido publicado por el Observatorio Social La Caixa, y atribuye esa falta de interés a la falta de formación artística que generalmente tiene la sociedad española.
Sin embargo, los españoles que han accedido a la formación superior señalan que son los problemas económicos los que les mantienen más alejados de lo que les gustaría de las actividades culturales. Así lo piensan el 21,5%.
Capítulo aparte merece el caso del cine: el bajo nivel educativo sumado a las dificultades económicas provoca que el 13% de los españoles que no han pasado de la enseñanza primaria acudan a las salas de cine al menos una vez al año.
El nivel educativo y la renta suelen ir a la par y cuando el primero aumenta la cifra de asistencia a las proyecciones cinematográficas se incremente también. En cuanto a los ciudadanos españoles que cuentan con estudios de secundaria, el 49% asiste con regularidad al cine, mientras que los que han pasado por la universidad alcanzan el 68%.
El mundo de los espectáculos en directo y lugares en los que se realizan actividades culturales en general existe una gran polarización, ya que la estadística se divide entre individuos que presentan una demanda alta y otros que no asisten nunca. La probabilidad de no acudir nunca disminuye de forma radical según la renta.