En los últimos tiempos las investigaciones de carácter laboral han sido las que más han aumentado. Movidas en buena parte por la crisis económica en la que ha estado sumergida el país, lo cierto es que son muchos los empresarios los que han decidido recurrir a un detective privado para ver si las bajas de ciertos trabajadores que podían tener en nómina eran fraudulentas o no.
Pero en contra de lo que pueda parecer, esta sospecha y esta práctica de recurrir a investigadores privados ha ido mucho más allá y es algo que se ha extendido también hacia las aseguradoras. Cada vez son más las mutuas de estas características que se deciden a poner el foco sobre personas con comportamientos sospechosos.
Y es que lo cierto es que aunque la gran mayoría de las bajas laborales están más que justificadas, hay cierta parte que corresponde con bajas muy prolongadas en el tiempo que se convierten en la perfecta tapadera para seguir cobrando prestaciones e incluso desarrollar actividades en B paralelas. Mientras, la empresa paga la seguridad social del asalariado y no recibe nada a cambio. Por ello son muchas las que no dudan en comprobar la veracidad del caso y recurrir a un detective privado.
En este tipo de situaciones, como es habitual, el profesional se encarga de recopilar primero toda la información que ha hecho que su cliente pueda sospechar sobre la veracidad del caso y, a continuación, lo que busca no es otra cosa que intentar resolver el caso. Para ello recurrirá a todos los procedimientos tradicionales, desde el pertinente seguimiento a la realización de vídeos y fotos que pudieran servir de prueba de cara a un juicio.
En España, un volumen importante de casos se dan dentro del área laboral y tienen como objetivo, como decimos, intentar destapar posibles casos de bajas fraudulentas.
No obstante, lo cierto es que no es lo único por lo que se puede recurrir a un profesional de estas características. Y es que la profesionalidad y el rigor que suele caracterizar a los detectives privados hace que los problemas por los que se puede recurrir a ellos sean mucho más amplios.
Si pensáis que en vuestro día a día podría despejar todo tipo de dudas que tengáis en estos momentos un detective privado y así estar más tranquilos, será tan sencillo como contratar los servicios de un buen profesional de estas características.
Para ello, en el caso de que lo que busquéis sea un detective especializado en el área laboral bastará con poner en Google “detective privado laboral” o términos de búsqueda similares y os aparecerán las búsquedas o, en su defecto, preguntar a posibles colegas de profesión que hayan tenido que hacer frente a este tipo de situaciones y os puedan asesorar ya sobre seguro. Esta opción para muchos es la más segura y la que desprende más tranquilidad mientras que otros prefieren seguir su propio criterio de búsqueda y no dejarse llevar en ese sentido. En cualquier caso, un buen detective os dará total confianza desde el primer momento y notaréis al hablar su experiencia y profesionalidad.