La compañía Lime, especializada en el servicio de alquiler de patinetes eléctricos, ha anunciado que retira todas sus unidades de la ciudad de Madrid, en relación a la ordenanza de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid.
72 horas para retirar los patinetes eléctricos
El Ayuntamiento de Madrid ofreció a las empresas de alquiler de patinetes eléctricos un periodo de 72 horas para retirarlos completamente de la ciudad.
El motivo de esta decisión se basa en una nueva ordenanza de movilidad, que concretamente argumenta una falta de información con respecto a dónde pueden comenzar o terminar el trayecto los usuarios de estos aparatos.
La ordenanza afecta tanto a Lime como a las otras empresas actualmente operativas en este sector, como a Voi y Wind.
Parón en el sector de los patinetes eléctricos
Lo que se auguraba como un nuevo sector comercial de transporte sostenible y económico, se ha encontrado en Madrid, como también en otras ciudades, con una férrea negativa por parte de los Ayuntamientos.
En la capital del Estado, por ejemplo, hay 18 compañías que pueden ofrecer este servicio. Las 3 mencionadas fueron las que solicitaron su operatividad más pronto y también las primeras en recibir un tajante rechazo.
La empresa de Lime ha cumplido los plazos de retirada de sus patinetes eléctricos, pero el daño ya está hecho para la compañía. Cuenta actualmente con 150.000 usuarios registrados, a pesar de que su trayectoria en Madrid ha sido breve, apenas de 4 meses. En conjunto, estos clientes han realizado medio millón de viajes, según cálculos ofrecidos por la empresa.
De momento se desconoce el futuro de este servicio. Desde Lime tienen esperanzas de que se reactive lo antes posible, para evitar la fuga de sus clientes, que de momento tienen que esperar para que el servicio vuelva a estar operativo.