En España todo parece preparado para unas nuevas elecciones y el ambiente que se deja ver en los diferentes partidos políticos es ya de precampaña. Desde ayer, el Rey de España Felipe VI recibe a los representantes de dichos partidos para decidir si hay que poner en marcha una nueva sesión de investidura o si se disuelven las Cortes Generales y se convocan unas nuevas elecciones.
Casi en tiempo de descuento el partido Compromís ha puesto sobre la mesa una nueva propuesta con el fin de alcanzar un pacto de gobierno basado en un acuerdo de la izquierda que podría integrar a diferentes partidos como Podemos, IU, Compromís y PSOE. Esta propuesta, bautizada “El acuerdo del Prado”, contiene 30 puntos y ha sido presentada a Felipe VI. Se trata de un acuerdo de mínimos para compartir por las fuerzas de izquierda que podría ser revisable cada seis meses.
Según Compromís, este documento debe suponer un primer paso para solucionar necesidades democráticas y sociales urgentes que demanda el pueblo español. Entre otras medidas, de llegar a este acuerdo, se derogarían las últimas dos reformas laborales, la ley mordaza, reformarían la Ley de Transparencia, crearían la Oficina contra el fraude y la corrupción y prohibirían las puertas giratorias.
Las reacciones no se han hecho esperar. De los 30 puntos presentados el PSOE estaría dispuesto a suscribir 27 y matizaría los que se refieren a medidas contra los desahucios, la derogación de las reformas laborales y la reforma del artículo 135 de la Constitución, con lo cual no parece que pueda producirse el acuerdo. Al respecto, Izquierda Unida ha pedido a Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, que rompa su pacto con Ciudadanos para que prospere la propuesta de Compromís y evitar la convocatoria de las elecciones. Por su parte, Albert Rivera de Ciudadanos no ha querido ni pararse a valorar el documento presentado por el partido valenciano y da por hecha la ruptura de su pacto con el PSOE para iniciar el nuevo proceso electoral. Pablo Iglesias, de Podemos, ha lamentado que el PSOE vuelva a dar una negativa y asegura que su partido seguirá trabajando en el futuro para conseguir un acuerdo.
En cuanto a la reacción del PP, el partido en el gobierno, su portavoz Rafael Hernando ha calificado esta iniciativa de “una charlotada de última hora” que desprestigia a la Cámara.
Así que parece realmente difícil que pueda alcanzarse un acuerdo en las últimas horas. Los españoles pueden prepararse para acudir a las urnas de nuevo.