Según el director de la RAE, Darío Villanueva, la decisión de Donald Trump de retirar la versión en castellano de la web de la Casa Blanca ha cumplido las previsiones más negativas que se podían esperar. A pesar de su carácter simbólico, demuestra un retroceso notable según el director de esta institución.

La medida supone ignorar la realidad estadounidense de las últimas décadas, que ha vivido una presencia cada vez mayor del español, con un gran número de hispanohablantes procedentes en su mayor parte de Hispanoamérica.

En la valoración que ha hecho el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, a través de su titular Íñigo Méndez de Vigo, no se trata de una buena noticia, ya que en EEUU hay 50 millones de hispanohablantes y es una lengua que ha ayudado a cohesionar una sociedad multicultural como la estadounidense. Esta decisión no podrá frenar el imparable ascenso y difusión del castellano en Estados Unidos y en todo el mundo.

Víctor García de la Concha, director del Instituto Cervantes, ha declarado que el gesto de la Casa Blanca le parece grave, ya que Trump hoy ya es el presidente de todos los norteamericanos y un 18% de su población habla español. Además, las encuestas señalan que el 95% de ellos considera importante que sus hijos y nietos sigan hablando español. Por si estos datos no expresaran con suficiente contundencia el arraigo del español en EEUU, García de la Concha señaló que, dentro de 40 años, hacia 2060, las previsiones indican que el porcentaje de uso del español será del 23,4%, es decir, casi la cuarta parte de sus habitantes.

Según el director del Instituto Cervantes, EEUU es un país que se ha hecho con  inmigrantes de todas partes y sus mandatarios no deberían adoptar una línea contraria al plurilingüismo que hoy en día es tendencia en todas las naciones. En su opinión la medida tiene que ver directamente con la expulsión de las minorías.